Enfermedades que afectan a la salud intestinal porcina:
- E. coli
- Rotavirus
- PEDv
- Circovirus
- Ileítis (final tardío)
Como ya se ha dicho, la barrera intestinal, la microbiota y la inmunidad intestinal se consideran los tres factores principales que contribuyen a la salud intestinal. La interacción de estos factores determina la utilización óptima de los nutrientes por parte del animal. Esto es especialmente importante en la fase de cría.
Indicadores de mala salud intestinal en cerdos:
- Diarrea
- Estado corporal
- Anorexia
Equilibrio de la microbiota para mejorar la salud intestinal
El tracto gastrointestinal (GI) alberga un ecosistema microbiano que contiene miles de especies bacterianas en una relación simbiótica con el huésped (o el animal). El huésped proporciona un entorno protegido y rico en nutrientes en el que la microbiota puede desarrollarse. A cambio, la microbiota proporciona resistencia a los patógenos, ayuda al desarrollo y mantenimiento de la inmunidad intestinal y sistémica y contribuye al desarrollo de la estructura intestinal. Los cambios en la población microbiana debidos a cambios en la dieta o a patógenos pueden ser perjudiciales para el huésped.
Entender la integridad intestinal
La barrera epitelial, o integridad intestinal en el caso de los cerdos, es el segundo factor de la salud intestinal y su función principal es absorber nutrientes. Esta barrera también se ocupa de proteger al huésped de patógenos invasores, toxinas y antígenos. Es habitual encontrar muchos patógenos, como Clostridium difficile y otros, como parte de la microbiota del intestino posterior. En condiciones difíciles, los patógenos migran por el intestino delgado, multiplicándose exponencialmente y creando un desequilibrio en el ecosistema microbiano.
Las toxinas producidas por los patógenos crean lesiones en el intestino delgado, reduciendo la capacidad del cerdo para digerir y absorber. Un componente importante en el mantenimiento de la barrera intestinal son las uniones estrechas, formadas por complejos proteínicos multifuncionales.
Las uniones estrechas sellan el espacio entre las células epiteliales, impidiendo así la translocación de microorganismos y otros antígenos a través del epitelio.